San Patricio es conmemorado el 17 de marzo en numerosas partes del mundo, aunque su origen se encuentra en Irlanda, país que lo reivindica como su santo patrón. Su historia es notable y merece ser explorada.
San Patricio, nacido en Escocia, vivió la mayor parte de su vida en Irlanda después de ser secuestrado durante su juventud y obligado a trabajar como esclavo cuidando rebaños. A pesar de este inicio desafortunado, era hijo de un matrimonio romano.
Durante su cautiverio, encontró su fe en Jesucristo y abrazó el catolicismo, logrando eventualmente escapar en un barco que lo llevó de regreso a Gran Bretaña. Sin embargo, con el tiempo, tomó la decisión de regresar a Irlanda voluntariamente. Se cree que falleció el 17 de marzo del año 462, según algunos historiadores.