La administración de la Casa Blanca ha rechazado y criticado las declaraciones de apoyo por parte de Trump a un posible ataque de Rusia contra los aliados de la OTAN que no estén al día con sus obligaciones financieras.
El ex presidente, quien podría ser un competidor de Joe Biden en las próximas elecciones presidenciales de Estados Unidos, hizo estas afirmaciones durante un mitin de campaña en Conway, Carolina del Sur, el pasado sábado. Sus comentarios también fueron condenados por Jens Stoltenberg, secretario general de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
El Gobierno de Biden ha calificado las palabras de Trump como “desquiciadas” y “atroces”, al respaldar la posibilidad de un ataque ruso contra los aliados de Estados Unidos en la OTAN que no hayan cumplido con sus compromisos financieros.
Durante el mitin, Trump sugirió que Rusia debería atacar a los países aliados de Estados Unidos que no hayan pagado sus deudas con la alianza militar. Esta declaración se produjo después de que Trump presionara a los legisladores republicanos para bloquear un proyecto de ley que incluía ayuda para Ucrania.
El portavoz de la Casa Blanca, Andrew Bates, subrayó que el presidente Biden ha fortalecido las alianzas internacionales y ha priorizado la seguridad del pueblo estadounidense. Bates condenó las palabras de Trump como peligrosas y perjudiciales para la seguridad nacional y la estabilidad global.
Jens Stoltenberg, secretario general de la OTAN, acusó a Trump de socavar la seguridad de los países miembros de la alianza, al amenazar con no proteger a aquellos que no contribuyan lo suficiente a la defensa colectiva. Stoltenberg reafirmó el compromiso de la OTAN con la defensa de todos sus miembros y advirtió contra cualquier ataque, afirmando que la alianza responderá de manera unida y contundente.
Charles Michel, presidente del Consejo Europeo, también criticó las declaraciones de Trump, acusándolo de servir a los intereses de Vladimir Putin y de no promover la seguridad y la paz mundiales.
Trump, quien parece ser el principal candidato republicano para las elecciones presidenciales de noviembre, ha expresado dudas sobre la existencia de la OTAN y ha condicionado la ayuda a Ucrania a ciertas políticas internas, lo que ha generado estancamiento en el apoyo financiero a ese país.