Las bolsas internacionales registraron caídas generalizadas al cierre de la semana, afectadas por la incertidumbre política en Estados Unidos, tensiones comerciales lideradas por el presidente electo Donald Trump, y la expectativa de datos clave de inflación que podrían influir en la política monetaria de la Reserva Federal en 2025.
Factores clave de presión en los mercados
- Cierre de gobierno en EE. UU.: La falta de consenso en la Cámara de Representantes sobre el presupuesto aumenta las probabilidades de un “shutdown”, lo que históricamente genera volatilidad en los mercados financieros.
- Amenazas comerciales: Trump advirtió sobre posibles aranceles a la Unión Europea si no incrementan las compras de petróleo y gas estadounidenses, lo que añade tensiones al comercio global.
- Inflación en EE. UU.: El índice de gasto básico en consumo personal, previsto con un aumento del 0,2% mensual, mantiene a los inversionistas atentos. Cifras superiores podrían disminuir las expectativas de una relajación monetaria en 2025.
Impacto en los mercados financieros
- Acciones: Las bolsas europeas cayeron un 1%, acumulando una pérdida semanal del 3%. En Wall Street, los futuros apuntaron a caídas de hasta un 1,1%.
- Bonos: Los rendimientos del Tesoro a 10 años superaron el 4,5%, con pérdidas consecutivas en el segmento por cuarto año.
- Divisas: El dólar retrocedió un 0,3%, mientras que el euro ganó un 0,2%, situándose en 1,03925 dólares. El yen registró una caída significativa tras comentarios del Banco de Japón sobre las perspectivas económicas.
- Materias primas: El petróleo WTI bajó un 0,6%, cotizando a 68,96 dólares por barril, mientras el oro subió un 0,5%, alcanzando 2.605 dólares la onza.
Perspectivas económicas
La incertidumbre política en EE. UU. y las posibles represalias comerciales generan un entorno de alta volatilidad. Los mercados estarán atentos a las decisiones de la administración Trump y a las políticas monetarias de la Reserva Federal, que serán clave para el panorama financiero global en 2025.
El escenario refleja los desafíos actuales, desde el manejo de tensiones comerciales hasta el impacto de la política fiscal y monetaria en un entorno económico global incierto.