Macron, durante una visita oficial en Tirana y mientras asistía a una cena de gala ofrecida por el primer ministro albanés, Edi Rama, calificó el atentado en Bruselas como un acto terrorista de naturaleza “islamista” y lo vinculó al reciente ataque en Francia del pasado viernes, señalando que “Europa está siendo sacudida”.
El mandatario galo fue uno de los primeros líderes internacionales en reaccionar ante el atentado, en el cual dos ciudadanos suecos perdieron la vida en un tiroteo perpetrado por un individuo que luego se dio a la fuga.
Francia se encontraba en el nivel de alerta más alto contra ataques desde el incidente del viernes, cuando un individuo de origen ruso apuñaló mortalmente a un profesor, ocurrido casi tres años después de otro ataque en el que un docente fue degollado por un terrorista de origen checheno.
Las autoridades belgas calificaron el atentado como un acto terrorista, y el ministro del Interior de Francia, Gérald Darmanin, ordenó fortalecer la seguridad en la frontera con Bélgica. El ataque en Bruselas tuvo lugar en Boulevard d’Ypres de la capital belga, cuando un individuo vestido con una chaqueta fluorescente de color naranja descendió de una motocicleta y abrió fuego con un “arma de guerra”. Un video grabado por un testigo mostró al agresor llegando solo en una motocicleta de baja cilindrada, abandonándola en el suelo y disparando rápidamente contra personas en la calle.
El atacante, con un casco blanco, persiguió a varias personas que intentaron refugiarse en un edificio con ventanas de cristal, disparando a una persona que yacía en el suelo. También disparó contra dos personas en un taxi antes de huir en su motocicleta. Se ha informado que las dos víctimas mortales eran de nacionalidad sueca.