Rechazando la idea de que se esté produciendo una corrida cambiaria. Esto, según él, se debe a que el Banco Central continúa adquiriendo dólares en el mercado oficial.
El Presidente señaló que la situación actual del mercado cambiario no puede considerarse como una corrida, ya que el Banco Central está realizando compras de dólares en lugar de ventas. Destacó que aquellos que anteriormente mencionaban un problema de atraso cambiario ahora hablan de una corrida, aunque explicó que es importante analizar la situación en su totalidad.
Milei atribuyó la reciente depreciación del peso a la incertidumbre generada por la situación legislativa en torno a la Ley Bases, lo que ha afectado negativamente el precio de los bonos y aumentado el riesgo país. Además, señaló que el tipo de cambio está relacionado con la tasa de interés y reiteró la determinación del Gobierno en mantener el equilibrio fiscal.
El Presidente también destacó la falta de reacción por parte del kirchnerismo ante ciertos escándalos, criticando lo que percibe como una doble vara en su actuar. Por otro lado, explicó que para que se produzca una corrida cambiaria, la cantidad de pesos en circulación debería ser significativa, algo que no ocurre en la actualidad debido a la política monetaria.
En cuanto a la interpretación de la subida del dólar, Milei mencionó dos enfoques posibles, indicando que uno de ellos es incorrecto. Argumentó que la disminución de la tasa de interés y el aumento del tipo de cambio no pueden ser interpretados como una secuencia causal directa, ya que la política de colocación de pasivos remunerados en el Tesoro tiene efectos importantes en términos monetarios.
Finalmente, Milei atribuyó la situación actual del mercado cambiario a la falta de avances en el Senado con respecto a la Ley Bases, que considera fundamental para el crecimiento económico y el bienestar de los argentinos. Expresó su frustración ante lo que percibe como prioridades políticas mal dirigidas, que, a su parecer, afectan negativamente a la población.
