La Legislatura porteña aprobó la suspensión de las elecciones Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) en la Ciudad de Buenos Aires. La medida impulsada por el jefe de Gobierno, Jorge Macri, contó con 55 votos a favor, 3 en contra y una abstención. Además, se confirmó el adelantamiento de las elecciones generales al 18 de mayo y la implementación de la boleta electrónica.
La decisión se tomó un día después de que el Congreso Nacional aprobara la suspensión de las PASO a nivel nacional. Dado que se trataba de una reforma electoral en período de sesiones extraordinarias y sin tratamiento previo en comisiones, la iniciativa necesitaba el respaldo de al menos 40 legisladores, cifra que fue superada gracias al apoyo de la UCR, La Libertad Avanza y el peronismo.
Argumentos a Favor y en Contra
Desde el Ejecutivo porteño sostienen que la suspensión de las PASO responde a un desinterés creciente de la ciudadanía en este tipo de elecciones y que la medida permitirá un ahorro superior a los 20.000 millones de pesos. “Es un gran avance, no solo para debatir los temas propios de la Ciudad sin estar atados a las elecciones nacionales, sino también para optimizar los recursos de los vecinos”, afirmó la vicejefa de Gobierno, Clara Muzzio.
Sin embargo, la legisladora Graciela Ocaña (Confianza Pública) cuestionó el cambio de modalidad y pidió utilizar la boleta única en papel en lugar del sistema electrónico. Además, criticó la separación de los comicios porteños de los nacionales, argumentando que unificar las elecciones en octubre hubiera generado un ahorro mayor.
Por su parte, el bloque de Unión por la Patria votó a favor de la suspensión de las PASO, pero su legisladora Claudia Neira rechazó la idea de que el ahorro económico justifique esta decisión. “La democracia no debe medirse en términos de gasto. Si siguiéramos esta lógica, lo más ‘eficiente’ sería no realizar elecciones en absoluto”, advirtió.
Postura de La Libertad Avanza y la Izquierda
Desde La Libertad Avanza, en línea con el presidente Javier Milei, consideraron que la eliminación de las PASO representa un alivio económico y propusieron que el dinero ahorrado se destine a un crédito fiscal en las boletas del ABL. No obstante, criticaron la falta de un cambio estructural en el sistema electoral. “La suspensión de las PASO es solo un parche. Seguiremos trabajando para su eliminación definitiva”, señaló la legisladora Pilar Ramírez.
Por otro lado, el Frente de Izquierda rechazó la medida y acusó al Gobierno porteño de manipular las reglas electorales en beneficio propio. “Jorge Macri busca evitar una derrota electoral. No vamos a convalidar este mecanismo”, denunció el legislador Gabriel Solano.
Finalmente, el diputado Yamil Santoro (Republicanos Unidos), aunque expresó su desacuerdo con la realización de las PASO, decidió abstenerse en la votación.
Con esta decisión, la Ciudad de Buenos Aires se suma a la eliminación de las PASO a nivel nacional y modifica su calendario electoral, estableciendo las elecciones generales para el 18 de mayo bajo un nuevo sistema de votación.
