Ahorrar en pesos en un contexto de alta inflación es un desafío. El valor de los pesos se deprecia rápidamente, lo que obliga a los ahorristas argentinos a buscar constantemente nuevas opciones. A continuación, exploraremos algunas de las alternativas al dólar que se están utilizando en Argentina a mediados de 2024.
Los ahorristas se convierten en “criptobros”
De acuerdo con Bloomberg, entre febrero y marzo de 2024, el comercio de criptomonedas en Argentina ha reemplazado en gran medida la compra de dólares como método de ahorro. Esto se debe en gran parte a la expectativa generada por el Halving de Bitcoin. Este cambio es significativo dada la larga tradición del país en la compra de dólares.
El economista Nicolás Gadano, basándose en datos del Banco Central, revela que los ahorristas argentinos poseen aproximadamente 200 mil millones de dólares, una cifra solo superada por Estados Unidos y Rusia. Este dato refleja la histórica tendencia del país a acumular dólares.
Pese a esta tradición, un número creciente de argentinos elige las criptomonedas como refugio contra la inflación y como una forma legal de proteger sus fondos frente a las restricciones para la compra de dólares que impusieron gobiernos anteriores.
Los plazos fijos tradicionales y los UVA
El plazo fijo ha sido una opción tradicional en el país. Un plazo fijo es una cuenta especial donde el dinero se deja depositado por un período, generalmente 30 días, a cambio de una comisión. Sin embargo, en 2024, los plazos fijos tradicionales no son tan atractivos debido a las bajas tasas impuestas por el Banco Central, que ofrecen un rendimiento mensual del 4,9%.
Esta tasa podría ser adecuada en otro contexto, pero actualmente no compensa una inflación que en algunos meses alcanza los dos dígitos. Por ello, los plazos fijos tradicionales han perdido atractivo este año.
Los plazos fijos UVA
Una alternativa en auge son los plazos fijos vinculados a las Unidades de Valor Adquisitivo (UVA). Estos ajustan su valor diariamente según el índice CER, basado en la inflación del INDEC. Al finalizar el plazo, los intereses se suman a un componente inflacionario, garantizando una ganancia real sobre lo invertido, aunque no protegen contra devaluaciones abruptas del dólar.
Inversiones en la bolsa
Invertir en acciones es otra estrategia para combatir la inflación, siempre y cuando se haga a largo plazo y con herramientas de análisis técnico para mitigar riesgos. Los inversores deben familiarizarse con conceptos como el MACD (Moving Average Convergence Divergence) para detectar variaciones en el impulso del precio de un activo.
Para aquellos menos familiarizados con el mercado, es recomendable buscar asesoría financiera. Las inversiones a corto plazo suelen ser más riesgosas, mientras que el enfoque a largo plazo es más seguro y rentable.
El atractivo del Merval
El S&P Merval, principal índice bursátil de la Bolsa de Comercio de Buenos Aires, es una herramienta clave para los inversores en el mercado argentino desde su creación en 1986. Incluye a las principales empresas del país, seleccionadas por su tamaño y liquidez, como YPF, Banco Galicia y Pampa Energía.
Invertir en el Merval permite a los inversores participar en el crecimiento de estas empresas, que demuestran solvencia económica y transparencia. Además, proporciona liquidez, facilitando la compra y venta de acciones, crucial en un contexto económico donde la inflación es una preocupación constante.