WASHINGTON D.C. – En una medida sin precedentes en su segundo mandato, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció el despliegue de la Guardia Nacional y el control federal sobre la policía de Washington D.C. La decisión, comunicada este lunes, tiene como objetivo declarado combatir el crimen y la problemática de las personas sin techo, en un movimiento que ha generado una fuerte controversia política.
Intervención Directa y Críticas a la Gestión Demócrata
Trump, flanqueado por la secretaria de Justicia, Pam Bondi, y el secretario de Defensa, Pete Hegseth, invocó la Ley de Autonomía de 1973 para tomar control del Departamento de Policía Metropolitana y desplegar 800 efectivos de la Guardia Nacional en un inicio. “Estoy anunciando una acción histórica para rescatar la capital de nuestra nación del crimen, el derramamiento de sangre, el caos, la miseria y cosas peores”, declaró el mandatario.
La decisión se produce tras semanas de críticas por parte de los republicanos a la gestión de la alcaldesa demócrata, Muriel Bowser, a quien acusan de no poder controlar la delincuencia. Trump aseguró que Washington D.C. tiene una tasa de homicidios “más alta que la de Bogotá o la de la Ciudad de México”, una afirmación refutada por la ex líder demócrata Hillary Clinton, quien citó cifras oficiales que indican una disminución de los delitos violentos en 2024.
Además de Washington D.C., el presidente advirtió que su estrategia de “mano dura” podría extenderse a otras ciudades gobernadas por demócratas que, según él, también están “infectadas” por la delincuencia, como Los Ángeles, Chicago, Nueva York y Baltimore.
Mano Dura Contra el Crimen y la Indigencia
A través de su red social Truth Social, Trump prometió “limpiar” la capital y expulsar a las personas sin techo, a quienes se les ofrecerá alojamiento “lejos del Capitolio”. La ciudad ocupó en 2024 el puesto 15 en el ranking nacional de personas sin hogar, con unas 5,600 registradas.
El presidente también respaldó propuestas para endurecer el tratamiento penal de menores, sugiriendo que la edad mínima para ser juzgados como adultos en casos de delitos graves se reduzca de 16 a 14 años. Esta medida cuenta con el respaldo de la fiscal federal Jeanine Pirro.
Previo al anuncio, Trump había ordenado a agencias policiales federales, como el Servicio Secreto y el FBI, reforzar su presencia en Washington D.C. con más de 120 agentes para apoyar a la policía local en la prevención de delitos.
La Alcaldesa Bowser Cuestiona la Medida y los Datos
La alcaldesa Muriel Bowser ha cuestionado tanto el diagnóstico de Trump como la efectividad de la medida. Según sus datos, la delincuencia violenta ha disminuido un 26% en comparación con 2024, y los homicidios han bajado un 12%. Bowser calificó las descripciones del presidente como “hiperbólicas y falsas” y señaló que el uso de la Guardia Nacional para tareas policiales no es el más eficiente.
La alcaldesa argumentó que la ayuda más efectiva del gobierno federal sería cubrir las vacantes judiciales y financiar a más fiscales para agilizar los procesos judiciales. A pesar de su oposición, la alcaldesa no puede activar la Guardia Nacional sin la autorización del gobierno federal, lo que deja a la capital en una situación de intervención directa. El conflicto político por la seguridad de Washington D.C. promete intensificarse en los próximos días.