Libertarios sin rumbo en busca de un dictamen
La Libertad Avanza presentó un borrador del proyecto con modificaciones para lograr un dictamen, pero no tuvo éxito. Intentarán nuevamente la próxima semana.
Los senadores libertarios Juan Carlos Pagotto, Ezequiel Atauche y Bartolomé Abdala carecieron de estrategia para la Ley Bases.
Nuevamente, las expectativas de La Libertad Avanza chocaron con la dinámica del Congreso, resultando en un nuevo fracaso legislativo para el gobierno nacional. El oficialismo no logró un acuerdo con los senadores disidentes del radicalismo y las fuerzas provinciales, lo que llevó a posponer la Ley Bases hasta la próxima semana. Aunque intentaron forzar un dictamen con algunos de los cambios solicitados, la falta de confianza de senadores como Martín Lousteau, Pablo Blanco, Guadalupe Tagliaferri y Edgardo Kueider impidió avanzar. En la Casa Rosada intentaron mostrarse firmes, pero el vice jefe de Gabinete, José Rolandi, fue visto desesperado buscando a Lousteau tras finalizar el plenario.
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A las 11 de la mañana, el presidente provisional del Senado, Bartolomé Abdala, manifestó confianza: “La intención del oficialismo es dictaminar hoy”. Sin embargo, cinco horas después, el titular del bloque oficialista, Ezequiel Atauche, solicitó un cuarto intermedio sin fecha definida. Durante ese tiempo, La Libertad Avanza pasó de afirmar que el borrador de la Ley Bases estaba casi cerrado a reconocer públicamente que no contaban con los votos necesarios. Las promesas de cambios y reuniones no lograron convencer a los senadores opositores.
Cambios y Reuniones
El plenario de comisiones del Senado comenzó en un clima tenso. Aunque el oficialismo circuló un borrador de dictamen, muchos senadores opositores no lo recibieron y se negaron a firmar sin verlo. Los senadores opositores exigieron la presencia de funcionarios para aclarar dudas, lo que llevó a Abdala a convocar un breve cuarto intermedio. Durante casi dos horas, los despachos del Palacio se llenaron de reuniones. Algunos senadores radicales, como Eduardo Vischi, estaban dispuestos a aceptar los cambios del Gobierno, mientras otros, como Lousteau, los consideraban insuficientes.
José Mayans reunió a su bancada y se reunió con Kueider. La oficina de Victoria Villarruel también estuvo activa, pero el número de senadores dispuestos a firmar seguía siendo insuficiente. A las 14 horas, Abdala retomó el plenario en un tono casi derrotado y permitió que los senadores expresaran sus pedidos de modificación.
Kueider solicitó la eliminación del RIGI para tratarlo por separado, la exclusión de Aerolíneas Argentinas de la lista de empresas a privatizar y un aumento en las regalías hidroeléctricas. Víctor Zimmermann pidió incluir a todas las instituciones científicas en las excepciones a la supresión de organismos públicos, modificar el capítulo de reforma laboral e incluir un artículo de defensa a la producción local.
Las demandas se acumulaban, pero no había claridad sobre el futuro del proyecto. Lousteau expresó su escepticismo sobre el proceso, y Abdala anunció otro cuarto intermedio sin fecha definida.
El oficialismo salió derrotado. La presión de la Casa Rosada para dictaminar fue evidente y en el Senado estaban furiosos. La oposición amigable, por su parte, criticó la falta de gestión del gobierno en el Congreso. Al final del día, mientras en la Casa Rosada insistían en no proponer más cambios, José Rolandi seguía intentando negociar con los senadores.
Conclusión
El oficialismo enfrenta un escenario complicado para la aprobación de la Ley Bases. La falta de consenso y confianza entre los senadores plantea un desafío significativo para el Gobierno, que deberá continuar negociando y realizando ajustes en su estrategia para lograr un dictamen favorable.
