Sergio Massa asumió la iniciativa política en el debate y puso de manifiesto la frágil alianza entre Javier Milei y Mauricio Macri. El PRO estuvo notablemente ausente en la Facultad de Derecho, donde no envió ningún representante. Además, Juntos por el Cambio no brindó apoyo público a Milei tras el debate, lo que resaltó la falta de respaldo a menos de una semana del balotaje.
Massa empleó la estrategia de cuestionar si Macri había escrito el discurso de Milei para exponerlo como un candidato de la “casta”. Esto generó tensión, especialmente debido a los conflictos entre Karina Milei y el fundador del PRO en cuanto a la fiscalización y la jefatura de campaña. Massa obligó a Milei a confrontar sus errores de campaña, incluyendo su referencia al Papa Francisco como “el maligno” y su elogio público a Margaret Thatcher.
Massa logró invertir los roles, haciendo que Milei tuviera que dar explicaciones sobre su campaña y su plataforma de gobierno, mientras que el actual ministro de Economía desviaba la atención de los problemas económicos como la inflación, el aumento del tipo de cambio paralelo y el aumento de la pobreza. Massa mantuvo a Milei en una posición incómoda utilizando preguntas de “sí o no” y manteniendo la iniciativa en el debate.
Massa también incomodó a Milei al cuestionar su relación con Mauricio Macri y al criticar su experiencia en economía, sugiriendo que se había destacado más como un comediante de televisión que como un economista.
En cuanto a su actuación en el debate, Massa se distanció de Milei al ser el único que se movió del atril al principio y mantuvo un tono más sereno, dirigiéndose a la cámara y al electorado en lugar de enfocarse únicamente en su oponente.
Massa también abordó temas importantes como las consecuencias de las propuestas de Milei, incluyendo la ruptura de relaciones comerciales con China y Brasil, que podría dejar a millones de trabajadores desempleados. Además, Massa destacó el impacto en la educación si se aplicara el sistema de vales propuesto por Milei, así como las implicaciones para las pymes y la igualdad de remuneración por igual trabajo.
En contraste, Milei pareció mantener la compostura con el objetivo de evitar un colapso emocional durante el debate. Sin embargo, tuvo dificultades para responder preguntas sobre seguridad, la eliminación de inhibidores en las cárceles durante la gestión de Patricia Bullrich en la presidencia de Macri, y aspectos básicos de trámites estatales y relaciones internacionales entre Estados.