Este evento está programado para el martes siguiente a las elecciones presidenciales y marcará el inicio del servicio de quinta generación en comunicaciones. Se llevará a cabo el martes 24 de octubre en el Centro Cultural Kirchner a través del Ente Nacional de Comunicaciones (Enacom), con el objetivo de recaudar aproximadamente 1.050 millones de dólares.
Tres empresas, Telecom, Claro y Telefónica, que son actores importantes en el mercado de las telecomunicaciones, han sido precalificadas para participar en la subasta. El procedimiento y el valor base se ajustan a experiencias exitosas de licitaciones de espectro en otros países y a procedimientos anteriores en Argentina. Aunque inicialmente se objetó el costo de los pliegos, que se consideró alto en medio de la devaluación del dólar, los 350 millones de dólares se deben pagar en pesos al tipo de cambio oficial, lo que disminuyó las preocupaciones.
Esta licitación se centra en la asignación de la banda de frecuencias entre 3.300 y 3.600 MHz para el servicio móvil terrestre con categoría primaria, dividiendo 300 MHz en tres lotes de 100 MHz cada uno.
El despliegue de 5G es una política a largo plazo que requiere colaboración entre el sector público y privado, con inversiones tanto de empresas como del Gobierno para garantizar la competencia y precios accesibles para los usuarios.
La subasta superó un amparo judicial impulsado por Telefónica y también la solicitud de Javier Milei, candidato presidencial de La Libertad Avanza, para posponerla hasta después de las elecciones, lo cual fue desestimado por la Casa Rosada.
Las tres principales empresas de telefonía móvil han presentado sus garantías y propuestas técnicas para participar en la subasta y ofrecer servicios con tecnología 5G en Argentina.
