Esta modificación mantiene la duración de los contratos en tres años, pero cambia la frecuencia de la actualización, que ahora será semestral en lugar de anual. Sin embargo, la implementación de esta reforma requerirá un proceso adicional que incluye su publicación en el Boletín Oficial, lo que tomará alrededor de 40 días. Durante este período de transición, los contratos seguirán sujetos a la legislación vigente.
La aprobación de la reforma se logró con los votos del Frente de Todos, algunos miembros del Interbloque Federal, Juntos por Río Negro y representantes de la izquierda. En contraste, fue rechazada por los libertarios, Juntos por el Cambio y algunos diputados provinciales.
Dada la reducción de la oferta de alquileres y los considerables aumentos de precios en la ciudad de Buenos Aires, como un incremento interanual del 245% en departamentos de dos ambientes, la reforma de la Ley de Alquileres se ha vuelto especialmente relevante.
Bajo la nueva normativa, los inquilinos deberán utilizar la fórmula del “coeficiente Casa Propia” para calcular los incrementos en sus alquileres y, por lo tanto, sus cuotas mensuales. Esta fórmula toma en cuenta el indicador más bajo entre la variación salarial promedio del último año y el promedio de inflación en el mismo período. Los valores de los últimos seis meses se multiplican y se aplican al monto actual de la cuota de alquiler, publicado por el Ministerio de Desarrollo Territorial y Hábitat nacional.
Por ejemplo, si alguien pagaba $70,000 de alquiler en mayo de 2023 y necesita calcular su cuota a partir de noviembre de 2023, el aumento sería de aproximadamente $97,000 utilizando la fórmula Casa Propia.
Además de estos cambios, la reforma incluye otras claves importantes, como la prohibición de publicar avisos de alquiler en dólares, incentivos fiscales para propietarios que alquilan sus viviendas y la exención del pago del Monotributo para ingresos de alquiler de hasta dos propiedades.
Para los contratos de alquiler vigentes bajo las reglas actuales, no habrá modificaciones contractuales hasta que finalicen. Por lo tanto, aquellos que firmaron contratos de tres años con ajustes anuales este año no se verán afectados por la reforma hasta 2026.
